martes, 29 de enero de 2013

Costa Rica, Pura Vida

-- "No quiero ir a Costa Rica", le repliqué a quien me convidaba, "invita a tu hermano.
El lo va a disfrutar, junto contigo."
-- "Mi hermano puede esperar, contestó,  pero tú no....."
Me hizo pensar, razonar. No quería ir, pero me moría por ir a Costa Rica. Estaba trabajando mis emociones, trabajando un espacio de mi vida, que había esperado tantos años para tomar la decisión.  Y estaba en todo el proceso, en esos precisos momentos. Era un torbellino de decisiones, y pasos a seguir....
Cuando jovencita, el Presidente del Colegio de Ingenieros, Arquitectos y Agrimensores de PR (en aquel momento estaban los Arquitectos) Ing. Víctor García, expresándose dijo en voz alta, "Me voy a jubilar y a irme a vivir a Costa Rica." Siempre me quedé pensando, si logró definitivamente su sueño.
 Así, que nació una interrogante por Costa Rica, dado que admiraba al ingeniero García, eso representaba una curiosidad para mí, de un hombre tan inteligente. Pasó el tiempo y 29 años después, me invitaban a Costa Rica. Y yo no podía ir. Pero, la respuesta del trotamundo me convenció:
--- tú no puedes esperar. Así, que acepté.
En el aeropuerto encontramos un grupo de jóvenes con mochilas, llegaban a Costa Rica a ver las aves, los llamados "bird seeing". Ya en Costa Rica, habíamos adelantado la estadía unos tres días, y el agente de viaje, le decíamos Tico, por ser de Costa Rica, como se les llama afectuosamente, nos había coordinado tres días con una residencia. antes de llegar al hotel. Una señora encantadora con dos hijas. que habia habilitado una habitación para nosotros. Esta residencia quedaba en el área más arriba de Costa Rica. Salimos a ver el área, y en una se nos avalanza una guagua mediana, reaccionamos al susto, y para sorpresa se baja el chofer, con algo en la mano, amenazándonos. Éramos tres, y no bastábamos a convencerlo. Al fín se fue.
El agente de viaje, nos dijo que estábamos en el "borderline" de C.R. y  Nicaragua.  Los nicas que bajaban a esa área a Costa Rica, eran un poco difíciles. Regresé a la casa de nuestra hospedadora, ella me ofreció leche, jugo, agua, y no quería, el susto era fuerte. Entonces dijo, whisky, y dije:   Sí..... así que estuvimos juntas un rato compartiendo. Ya al tercer día nos movimos al hotel Presidente.
Para mi sorpresa, todo, todo estaba lleno de puertorriqueños. Y el cuarto disponible que nos dieron, fue un "up-grade", una mejora del servicio, y subimos al  piso octavo. "Pura vida", me saludaban todos. 
Ahí, en el piso octavo se encontraba para deleite, y preferiblemente para los up-grades residentes, un jacusi, con la mitad del techo al aire libre.  Era lo que yo necesitaba. Esas lucecitas medias, ese ambiente amplio, y el cielo abierto.   Pura vida - decía yo también a todos, uniéndome al saludo costarricence.
 El primer día, mejor dicho noche, estuve llorando dentro del jacusi, sanando todo lo que había estado apretando en mi pecho en P.R.  Ya los siguientes días. Nos movimos a las excursiones de aguas termales, y a disfrutar de todo el amor de estos ticos y ticas, porque aprecian mucho a los puertorriqueños. Luego al volcán.
Algo curioso que encontramos fue cuando visitamos un McDonald. Habían incluído en su menú, pico de gallo. y eso desayunamos. ""Si no puedes contra ellos, únete a ellos", parecía decir el payaso rojo. La dieta diaria de Costa Rica es bastante vegetariana, los costos, en el momento que fuimos, no era un lujo, como aquí en Puerto Rico, que es casi gourmet, consumir en un restaurante natural. Era en todos lados, y con el cambio de moneda, más accesible.
Fuimos a una discoteca. Las amigas de mi compañero de viaje, me buscaban, qué diferencia, nos rodeaban para vernos bailar. Me salí de la discoteca, sólo por distraerme,  y ellas me regresaron. Eran de Heredia. Dicen que equivale como al Condado de P.R. Quedé impresionada con su gente, con su sencillez y amabilidad.
Regresé con un baño de paz, de tranquilidad, con energía de tanto amor recibido, gracias a Dios,  para cerrar un ciclo inconcluso.  
 Tenía que ir, porque realmente,  Costa Rica, ni yo,  podíamos esperar.

Nota --
Viajes Tony en la calle San Jorge, en Santurce, tiene la exclusividad para viajar a Costa Rica, y através de la línea aérea Copa.






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